La supervisión de nuestro equipo de la Residencia y Pisos supervisados «Leganés» ha sido dinámica, pudiendo participar desde una misma. Como profesionales, nos hemos sentido cómodas y validadas participando y dando nuestra opinión.

El clima de la supervisión nos ha parecido muy cómodo, el supervisor valoraba cada intervención y dejaba el espacio de escucha necesario para la respuesta de cada profesional. Creemos que ha propiciado la interacción entre el equipo y nos ha resultado muy ilustrativa y pedagógica.

Cabe señalar que ante conceptos muy complejos y desde el psicoanálisis, el supervisor ha sabido adaptar el lenguaje de forma que puede ser entendido por todo el equipo, además de poner ejemplos muy prácticos y visuales. Nos ha transmitido cercanía, empatía y muy útil en su manera de comunicar la información. Por otro lado, a pesar de que en cada supervisión llevásemos un caso diferente, la forma que tenía de transmitirnos sus ideas ayudaba al equipo a extrapolarlo a otras intervenciones. Además de este lenguaje claro y sencillo, ha sido capaz de generar un clima seguro, horizontal y sin juicios, que ha permitido que la participación del equipo sea elevada y muy dinámica.

La utilización de una estructura durante las sesiones (exposición del caso, ronda de nuestro criterio técnico, su explicación desde la teoría psicoanalítica y, finalmente, itinerario de intervención) nos ha facilitado la comprensión de sus explicaciones. Ha compartido ideas novedosas que el equipo no había podido pensar y nos ha ayudado a poder llevarlas a cabo con líneas de trabajo claras que hemos podido aplicar en nuestro día a día. 

Valoramos como algo muy positivo que el supervisor nos ofrezca un punto de vista externo de los casos, sin juicios, ya que a veces consideramos que estamos tan inmersos en estos que no somos capaces de verlos con perspectiva para valorar otro tipo de intervenciones, por lo que nos ha ayudado a rebajar el peso a la hora de dar solución a todo lo que le sucede a las personas con las que trabajamos, aclarando los límites de nuestro trabajo.

Como mejora, nos parece importante aumentar las horas de supervisión en una sesión más, ya que es un espacio muy enriquecedor para el desarrollo profesional y la labor diaria que realizamos.


Desde hace más de 12 años, los equipos de trabajo que tienen atención directa a usuarios en cualquiera de los programas, servicios y recursos que gestiona Fundación Manantial, cuentan a su disposición con una herramienta de formación e intervención y una metodología estructurada de trabajo denominada supervisión.

Pero, ¿qué es la supervisión? Utilizaremos las palabras de Carmina Puig, profesora de la Universidad Rovira i Virgili de Tarragona, en su artículo “La supervisión en los equipos de Servicios Sociales: una oportunidad para la reflexión, el pensamiento y el cuidado de los profesionales”: La supervisión es el análisis de la práctica profesional que realizan los trabajadores de ámbitos psicosociales. Es un trabajo sobre el trabajo, un meta trabajo que se sitúa en la interfaz entre el aprendizaje, la formación, la educación y el apoyo en una organización o institución. La supervisión en la intervención social, llevada a cabo por un supervisor externo a la institución, es un proceso y una relación que tiene como objetivo revisar el trabajo profesional y los sentimientos que acompañan la actividad. También ayuda a contrastar los marcos teóricos y conceptuales con la praxis cotidiana.

Saber más sobre las supervisiones en Fundación Manantial

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2 comentarios

  1. Me interesa saber más sobre los pisos supervisados por esa Entidad a saber:
    -funcionamiento
    -como se financian
    -como se solicita en este caso para un enfermo bipolar
    -que requisitos se requieren para ocupar plaza en dichos pisos

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